Si bien es cierto que hay muchas formas de realizar estiramientos de forma correcta, los beneficios que aporta este tipo de ejercicios, a nivel de ganancia de elasticidad y rangos de movilidad articular, no tienen comparación con los utilizados de forma estándar por las personas que quieren mejorar su condición física en el deporte o simplemente aliviar sus dolores.
Las siglas FNP significan facilitación neuro propioceptiva y se basan en el método Kabat.
Este tipo de técnica juega a favor de los propios mecanismos sensitivos del cuerpo y no en contra, por lo que será más fácil obtener mejores resultados en menos tiempo, siendo menos dolorosa para el paciente que los estiramientos pasivos, lo cual es perfecto para la atención en medicina deportiva, traumatología, pacientes con problemas neurológicos, geriatría, pediatría, etc.
¿Cómo se realizan?
Estos estiramientos se realizan pidiendo una contracción isométrica contrarresistencia del músculo a tratar, que dura aproximadamente unos 6 segundos.
Posteriormente, el paciente relajará la zona y realizaremos una elongación hasta la siguiente barrera muscular que encontremos.
Esta secuencia se suele efectuar de 3 a 4 veces.
Dicho de manera sencilla, buscamos fatigar el músculo previamente, para que cuando necesitemos estirar, el músculo relaje y ceda de manera más natural y sencilla.
Muchos terapeutas prefieren trabajar coordinando respiración-movimiento, pidiendo al paciente que tome aire y empuje en apnea inspiratoria y que exhale el aire en la fase de relajación.
Factores a tener en cuenta
Es conveniente que el terapeuta dé indicaciones sencillas y evite términos técnicos que dificulten el entendimiento por parte del paciente.
Dichas indicaciones, tienen que controlar aspectos como el tiempo, el tono y la claridad, siendo frecuente variar el tono para diferenciar la fase de fuerza o contracción de la fase de relajación.
Se debe cuidar al máximo la trayectoria del movimiento en la fase de contracción, debe ser siempre en dirección antagonista al movimiento que queramos ganar. Es ahí donde tendremos que ofrecer resistencia suficiente para que el ejercicio sea isométrico.
Debemos asegurarnos que se realiza fuerza solo con la parte indicada, necesitamos el mayor desbordamiento de energía a nivel propioceptivo en la zona a tratar, y esto lo conseguimos localizando el esfuerzo en ese musculo, además de evitar daños por posturas antiálgicas, que suelen darse al intentar generar el movimiento con todo el cuerpo en posiciones a las que no estamos habituados.
Al encontrarnos con un método tan efectivo para la mejora de los rangos de amplitud, cabe esperar que se produzcan más roturas fibrilares, por lo que en algunas personas puede que no sea el método más conveniente de realizar inmediatamente antes o después de una actividad deportiva o de alta intensidad.
Como conclusión las técnicas de FNP son indispensables para cualquier profesional de terapia manual, especialmente en el área del movimiento, pues son altamente efectivas y menos dolorosas en comparación con otras técnicas.
Gaby Diaz (Osteópata) Socio de COFENAT nº 2120.