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Las técnicas - Reflexología Podal
Reflexología Podal ¿Qué es la Reflexología Podal?
 
La Reflexología Podal es un método de masaje basado en la existencia de zonas reflejas en los pies, que representan a todos los órganos y partes del cuerpo. De esta manera, mediante presión y masaje de estos puntos de los pies se actúa a distancia sobre todo el organismo.
 
Con la Reflexología, se influencia, a distancia, sobre todos los órganos y sistemas corporales, circulación sanguínea, sistema linfático, endocrino, neurológico y osteoarticular.
 
Los buenos resultados de la Reflexología Podal y la escasez de efectos secundarios, hace que sea aplicada cada vez con más frecuencia.
 
¿En qué casos es beneficiosa la Reflexología Podal?
 
La Reflexología Podal produce una estimulación de las defensas del organismo y favorece la eliminación de residuos y sustancias tóxicas, estimulando los procesos de regulación naturales del organismo, por lo que se puede aplicar a cualquier persona como terapia complementaria (no sanitaria).
  • Es relajante, reduce el estrés y es muy agradable de recibir.
  • Mejora la circulación.
  • Favorece la liberación de toxinas.
  • Equilibra los distintos sistemas.
  • Revitaliza la energía.
  • Actúa de forma preventiva.Eso sí, para su empleo es necesario tener en cuenta algunas contraindicaciones.
¿Cuándo no se debe de utilizar la Reflexología Podal?
 
  • En enfermedades agudas o infecciosas que cursan con un estado febril elevado, dolores fuertes, espasmos, hemorragias.
  • En personas débiles, de edad avanzada y pacientes que acaban de superar una enfermedad o intervención quirúrgica grave.
  • Durante el embarazo, sobre todo en caso de peligro de abortos o parto prematuro o con antecedentes de ellos.
  • En caso de cáncer, sobre todo en metástasis.
  • Durante la menstruación, no se actúa sobre la zona refleja del aparato genital.
  • En diabéticos insulinodependientes, se ha de llevar un control de glucosa (bajo control médico) por la posibilidad de oscilaciones en el nivel de glucosa en sangre.
  • En caso de hongos (pie de atleta, micosis), heridas, llagas o cualquier tipo de erupción en los pies.
  • Inflamación del sistema venoso o linfático (trombosis, flebitis…).
¿Cómo es una sesión de Reflexología Podal?
 
En una primera toma de contacto se realiza un examen visual para observar el pie, el color de la piel, así como cualquier otra alteración como sudoración excesiva, callos, durezas, verrugas, sabañones, heridas, etc. También se presta atención a la morfología del pie ya sea pie plano, pie cavo, hallux valgus, dedos en garra o en martillo o el tobillo valgo o varo, que en zonas reflejas del pie, pueden influir a nivel reflejo sobre los órganos correspondientes.

Después, se palpa la textura de la piel, se presiona sobre las zonas reflejas y se hacen tests de movilidad para el tobillo, el pie y los dedos de los pies. En condiciones normales, los pies deben ser indoloros, elásticos y cálidos. Cualquier alteración de estos parámetros en las zonas reflejas puede manifestar un trastorno en los órganos correspondientes.
 
Se presta especial atención a las zonas anormales de reflejos, que originan sensaciones desagradables y dolor acentuado. A veces, se perciben pequeñas estructuras cristalinas bajo los dedos, que indican la existencia de un trastorno a este nivel. Estas zonas son atendidas específicamente durante la sesión de reflexología.
 
El masaje de Reflexología Podal se realiza en ambos pies, empezando por el pie izquierdo. Se suele trabajar por sistemas y órganos, sistema nervioso, sistema óseo y sistema muscular. Se realiza mediante presiones, fricciones y movilizaciones de las articulaciones del tobillo y pie. La presión se dosifica para no sobrepasar el umbral de dolor de cada persona. Y su duración puede ser de pocos segundos a varios minutos. Pueden ser directas y circulares estimulantes o sedantes.
 
El masaje en bebes y niños pequeños es delicado, con presiones suaves y de corta duración. En los niños de 8 a 10 años en adelante puede hacerse para favorecer el desarrollo osteomuscular y la función del sistema endocrino, regular el sistema nervioso, y estimular el sistema inmunitario.

El masaje en ancianos también es suave y delicado. Puede ayudar en las funciones motoras, al sistema nervioso, la respiración, el tránsito intestinal, y al sistema urinario.
Duración de la sesión y sesiones posteriores.

El tiempo de una sesión de Reflexología Podal puede ser muy variable, porque depende del caso, pero pueden oscilar entre 30 a 90 minutos.

Las sesiones de relajación o para prevención, pueden durar 30 minutos.

En caso de trastorno, la primera sesión puede durar entre 60 a 90 minutos, porque hay que obtener información al respecto, explorar y atender los puntos reflejos. A continuación, la duración promedio de las sesiones es de unos 45 minutos por cada sesión.

El número de sesiones variará en cada persona y la frecuencia de las sesiones suele ser semanal.

Reacciones del usuario.

Normalmente, la Reflexología Podal es bien tolerada. Aunque durante la sesión puede sentirse molestia momentánea de una zona refleja, que normalmente cesa en intensidad o desaparece. También, puede surgir sudoración en distintas partes del cuerpo o hipotermia. Después de las sesiones, las reacciones siempre deben interpretarse como positivas aunque sean molestas, porque suelen ser depurativas, como:
  • Cambios gastrointestinales, en el sistema de evacuación.
  • Aumento de la diuresis.
  • Aumento de la sudoración corporal.
  • Aumento de las secreciones bronquiales, nasales o vaginales.
  • Cefaleas, que normalmente suelen desaparecer.
  • En personas diabéticas, controlar más a menudo el nivel de glucosa en sangre.
  • Reacciones psíquicas.
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